Los ciudadanos estadounidenses no necesitamos visa para entrar en Canadá, ni los canadienses para entrar en Estados Unidos.  De hecho: ¡ni siquiera nos sellan el pasaporte con el sello de entrada!  Sin embargo, le pedí al oficial de aduana que me sellara el mío como recuerdo de mi visita.  Luego de pensarlo unos segundos, me puso el sello, pero con una nota que indicaba que se había colocado como una cortesía, ya que entre ambos países existe un acuerdo de no estampar los pasaportes con el sello de entrada.

Así las cosas, entramos en Canadá el sábado 16 de mayo, a golpe del mediodía y nos dirigimos, de inmediato a un pueblito llamado Woodstock, en la provincia de Ontario, donde teníamos ya reservado un motel que resultó ser aceptable.

Hay que recordar que en Canadá se habla de kilómetros, no de milla, así que los letreros de velocidad permitida están en kilómetros.  Lo mismo con la gasolina, que se calcula en litros: ¡no en galones!  Al principio es un poco confuso.   En el camino nos impresionó ver la cantidad de molinos de vientos generadores de electricidad, que según he leído: ¡no sirven pa’un carajo!   Deben servir para algo, cuando hay un montón.

Los billetes y las monedas canadienses nos parecieron interesantes, así que guardé un ejemplar de cada billete y moneda para luego enmarcarlos, lo que hice justo al regresar de viaje.

Nos paramos a almorzar y a “curucutear” por los pueblitos, total que llegamos al hotel ya pasada las 9 de la noche.

Lo bueno y lo malo en cuestiones de reservaciones hoteleras se lo debemos a nuestra hija, María Carolina.  Ella fue la que nos organizó las reservaciones en los hoteles y moteles de nuestra II Luna de Miel.  A medida en que nos íbamos acercando, ya de noche cerrada, al motel de Woodstock, comenzamos a temer si se repetiría la historia del antro de Atlanta, pero al final todo terminó “fino”.

En esta oportunidad Maria Carolina no se equivocó.  Sin ser una maravilla de CINCO ESTRELLAS, el motelito dio la talla y estaba, en efecto, administrado por unos indios (de la India), que erróneamente llamamos “hindúes”.  El motel se llama “Westmount Motel”, está ubicado en la 585076 Beachville Rd, Woodstock, ON N4S 7V6, Canadá y su teléfono es +1 519-539-2073.  Tiene 2 estrellitas nada más, pero es limpiio y bien mantenido.  Lo recomendamos ampliamente.  Si piensan visitar Las Cataratas del Niágara, este es el motel perfecto.

Woodstock, a una 1.500 millas de Miami, es una ciudad en el suroeste de Ontario, Canadá. La ciudad tiene una población de 40,902 según el censo canadiense de 2016.  Woodstock es la sede del condado de Oxford, en la cabecera del río Támesis no navegable, aproximadamente a 128 km de Toronto y a 43 km de London, Ontario. La ciudad es conocida como la capital láctea de Canadá y se promociona a sí misma como “La Ciudad Amistosa”.

Woodstock fue colonizado por primera vez por colonos europeos y leales al Imperio Unido en 1800, comenzando con Zacharias Burtch y Levi Luddington y se incorporó como ciudad en 1851.  Desde entonces, Woodstock ha mantenido un crecimiento constante y ahora es una ciudad pequeña. en el suroeste de Ontario.   Como pequeña ciudad histórica, Woodstock es una de las pocas ciudades de Ontario que aún conserva todos sus edificios administrativos originales.   La ciudad ha desarrollado un fuerte enfoque económico hacia la manufactura y el turismo.   También es una ciudad comercial para la industria agrícola circundante.

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Woodstock alberga un campus de Fanshawe College.   La ciudad alberga una serie de exhibiciones culturales y artísticas, incluido el Museo Woodstock, un sitio histórico nacional.   Los festivales de verano de Woodstock contribuyen a su industria turística; sin embargo, su actividad económica se centra en el centro fabril, albergando la ciudad varias fábricas de fabricación de automóviles.   El extremo oeste de la ciudad tiene paisajes urbanos victorianos excepcionalmente bien conservados; la más notable de estas calles es Vansittart Avenue, llamada así por el almirante Henry Vansittart, uno de los primeros pobladores de la ciudad.  Woodstock tiene un gran centro comunitario con una pista con capacidad para 1.800 espectadores para los partidos de hockey.  El centro también tiene un gran salón de banquetes y un atrio que alberga muchas reuniones sociales para la comunidad.