¡Vamos a ver si nos entendemos! Lo mejor que le pueda pasar a Venezuela es que Joe Biden (dirigido por el Clan Obama) sea colocado (por el Deep State) en la Casa Blanca. Les explicaré por qué.
Ya sabemos cuál es la “receta” que el “Grupo Trump” tiene para Venezuela: ¡la mismita que le encasquetaron a Nicaragua para evitar que Los Contras terminaran defenestrando del poder al sandinismo! Por cierto – como me he cansado de decir – en esa receta nica metió sus manos “el amigo” Elliott Abrams.
La “opción” de una intervención militar en Venezuela por parte de Estados Unidos, jamás estuvo sobre la mesa, ni debajo de ella. Eso fue puro cuento-chino. Lo que se logró con esa supuesta “opción” fue guaralear, entretener y esperanzar – ¡de manera infundada! – a los pobres, infelices y NOBLES venezolanos. Lamento aguarles el día a muchos de mis lectores, pero jamás vi una verdadera voluntad política por parte de Trump de ayudar en la liberación de Venezuela, a pesar de que el régimen que la subyuga es un latente peligro para la seguridad de Estados Unidos y para toda la región.
Por otro lado está probado que con “sanciones” no se combate al narco-castroestalinismo internacional, tal y como con banderillas no se matan toros de lidia. Si no me creen: ¡pregúntenles a los Castro! Las fulanas “sanciones” son un “engaña-bobos”. En Venezuela hay suficientes riquezas como para mantener a ese perverso, genocida e infausto régimen en el poder hasta que los polos hiervan. Cada día, con o sin “sanciones”, habrá menos recursos para el pueblo en general porque la destrucción es sistemática y programada, pero a los grandes cacaos del régimen esas sanciones no les hacen ni coquito… y menos ahora que se ha descubierto que Venezuela es uno de los países del mundo más ricos en coltán.
¿Quiieren unas sanciones buenas? TodoS aquellos buques que atraquen en puertos venezolnos: ¡no podrían atracar en puertos estadounidenses en cinco años! Todas aquellas aeronaves que aterricen en aeropuertos venezolanos: ¡no podrían aterrizar en aeropuertos estadounidenses en cinco años! Eso: sumado a un VERDADERO BLOQUEO naval y aéreo. El Capítulo III de la Ley Helms Burton fue congelado desde que esa ley se promulgó durante la administración Clinton. Trump lo descongeló, pero NO SE LE HA VISTO EL QUESO A LA TOSTADA.
Con esto, OJO: no quiero decir que haya que votar por Biden. De todas maneras, soy uno de los muchos convencidos que a la Casa Blanca no se llega por la vía electoral de los votos: ¡llegan aquellos que el Deep State decida! A estas alturas, siendo el 7 de septiembre de 2020, ya los “candidatos” saben quién será el próximo inquilino de la 1600 Pennsylvania Ave NW, Washington, DC 20500. En todo evento y por si acaso me equivoco: ¡VOTEN POR TRUMP CON LOS OJOS CERRADOS Y RUÉGUENLE MUCHO A DIOS!
Si a la Hillary la hubieran llevado a la presidencia, los venezolanos – tal vez – hubieran tomado otro camino más realista y se hubiera ahorrado un tiempo inmensamente valioso. Se hubieran tenido que “montar o encaramar”. Trump los puso a “esperar a que cayeran los mangos”, como hubiera dicho la Abuela Carmelina, QEPD.
Si “repiten” a Trump como presidente de EE.UU., el guaraleo, las esperanzas infundadas, sanciones inocuas, financiamientos a “opositores” (que hoy, incluso, apoyan a Biden) y el congelamiento del “tema Venezuela” hasta que se considere lo contrario, seguirán sobre la mesa. Mientras tanto continuarán muriéndose venezolanos por falta de comida y medicina, al tiempo que el régimen sigue fortaleciéndose impune e infinitamente. El pueblo permanecerá acéfalo de un “verdadero líder”, sin entender la importancia del “liderazgo colectivo o compartido” y quienes hoy fungen como tales, seguirán jurungando mucho la cadena: ¡pero jamás tocarán al mono!
Ya hemos visto que el mejor negocio para Guaidó (de quien Trump acaba de decir que lo apoyará hasta que “cese la usurpación”) y para su pandilla, es mantener al régimen de los Castro en el poder en Venezuela, lo que significa más “financiamiento”. Con esos bueyes no se puede seguir arando. ¿Será que existe un factor tan poderoso que ciega a Trump con respecto a esos lacayos del narco-castroestalinismo que se dicen opositores y que él apoya y financia? ¿Será que los intrínsecos nudos de la nueva geopolítica mundial lo mantienen castrado? Todos y cada uno de los representantes del “presidente interino” se juntan – ¡olímpicamente! – con los miembros de la rama más radicalmente izquierdista del partido demócrata. ¿Eso le da esperanzas a un pueblo subyugado, MISERABLE e inmisericordemente, por los Castro?
Ahora bien. Si colocan a Joe Biden en la Casa Blanca: comenzaría Cristo a padecer. Ahí es cuando podríamos aplicar el siguiente y sabio refrán: “lo bueno que tiene esto… ¡es lo malo que se está poniendo!” Sería cuando tendríamos que demostrar “la gloria de ese bravo pueblo”, porque la ÚNICA opción sería luchar: ¡o perecer de una vez buena! Para estar guindando: ¡mejor es caerse!
De todas maneras de repetir Trump, el “respirito” – ¡si acaso! – sería por cuatro añitos nada más. ¿Y después? La inmensa mayoría de la gente, tanto de un lado como del otro, cree que la solución está en el campo de la política: ¡de las elecciones! El fabianismo ha avanzado demasiado lejos en Estados Unidos y le llegó la hora de rematar violentamente, como evidentemente lo estamos viendo todos los días en las calles de muchas de las grandes ciudades de este país. La política dejó de tener sentido hace ya mucho tiempo. En el año 1975, por ejemplo, el comité de la cámara de representantes del congreso federal de EEUU en contra de las activides anti-estadounidenses, fue disuelto. Los fulanos “Círculos Bolivarianos” operan en este país abierta e impunemente: ¡desde el año 2004! Los líderes del BLM han declarado que son marxistas entrenados. ¿Entrenados en dónde?
La Solución
La solución en cuanto a la libertad de Venezuela SIEMPRE HA ESTADO SOBRE LA MESA: la sublevación cívica, activa, generalizada y sostenida. No existe un ejército en el mundo que supere en número a los 15 millones de venezolanos adultos, dispuestos a paralizar a Venezuela de rabo a cabo y de manera adecuada: sin exponerse a muertes, detenciones y mutilaciones. Una vez paralizada, ADECUADAMENTE, Venezuela: ¡comenzaría el verdadero merequetengue o tamunangue! Con Joe Biden nos llegaría la hora de la “Primavera Venezolana”.
Con el tema del virus chino el régimen ha paralizado a Venezuela, sin embargo, esa paralización tiene que venir por parte del pueblo en general y: ¡después que revienten todos los infiernos!
Claro… se dice fácil. Si el grueso de los venezolanos, UNA VEZ MÁS, escucha la voz de los FALSOS OPOSITORES de esa FALSA OPOSICIÓN y se sienta a esperar a que la ayuda le venga del Cielo o “del Norte”: ¡no lo salvaría ni el propio Dios! Me niego a aceptar que un pueblo que les llevó la libertad a cinco naciones: ¡sea incapaz de liberarse si mismo!
Miami 7 de septiembre de 2020
Robert Alonso
@Maestro_May9r